miércoles, 23 de agosto de 2017

Mi hijo

Un lector me dijo que para él faltaba en el libro un capítulo con la visión del padre de Harold Galdonfinski. Estoy de acuerdo. Me puse en contacto con Armandek Galdonfinski, el padre,  y ésto fue lo que me dijo:



Al principio me costó darme cuenta de que era él. Después de casi cincuenta años sin saber de su vida me tuve que enterar por la televisión de que se había convertido en un asesino profesional. No es que me sienta orgulloso de ello, pero tampoco me parece mal.
Por un momento pensé en ir a verle a la cárcel, pero luego me dije que ¿para qué? ¿Qué le podía decir? Aunque yo lo engendré no soy su padre. Me alegro de haberlo abandonado siendo un chaval. Un fracasado no puede hacer sino fracasar a otros. Le hice un favor a él y a su madre al irme. Si me hubiese quedado ella habría acabado muerta y vete tu a saber si él también. Estoy seguro de que la vida le ha ido mucho mejor sin estar yo a su lado. Eso es lo único que puedo decir.